2020
El arrepentimiento es un don
Enero de 2020


Jóvenes adultos

El arrepentimiento es un don

Imagen
giving a gift

Fotografía de Getty Images

Creo que a veces es fácil que los jóvenes adultos piensen que el arrepentimiento es algo temible. Es verdad que puede dar miedo admitir lo que hemos hecho si tememos que ello suponga perder el amor de las personas que nos importan, o de nuestro Padre Celestial. Con esa visión del arrepentimiento, podríamos estar tentados a confesar “solo lo suficiente” para superar lo que nos parece una prueba para pasar al siguiente nivel. No obstante, he aprendido por experiencia que el verdadero arrepentimiento no es eso. El arrepentimiento no siempre es agradable, pero si entendemos lo mucho que el Señor nos ama y desea ayudarnos, el temor se disipa a medida que ejercemos la fe en Su capacidad para limpiarnos. He aprendido que, al ejercer la fe en Cristo por medio del arrepentimiento, mis errores pasados no tienen por qué definir mi presente ni mi futuro (lee más en mi artículo, en la página 44).

En los artículos solo en versión digital, Evita señala que el verdadero arrepentimiento nos hace sentir gratitud por el Salvador y Su expiación, y nos da fuerza para resistir la tentación en el futuro. Leah añade que ni siquiera tenemos que esperar a la Santa Cena el domingo; volvernos cada día al Señor por medio del arrepentimiento nos brinda poder para romper incluso pequeños hábitos que nos alejan de Él. Y si cometemos errores graves, Jori dice que el proceso del arrepentimiento puede enseñarnos acerca del amor del Salvador por cada uno de nosotros.

El arrepentimiento es un don que me siento agradecido de tener en mi vida. Dios sabe que somos humanos y que en ocasiones tomamos malas decisiones, pero aunque somos imperfectos, hay esperanza para nosotros. Si ponemos nuestra confianza en el Salvador, Él caminará con nosotros en la senda de regreso a nuestro Padre Celestial, sin importar el tiempo que tome.

Atentamente,

Richard Monson