2018
Trabajando con Fe en Dios
August 2018


Voces de los Santos de los Últimos Días

Trabajando con Fe en Dios

El élder James E. Faust dijo en una conferencia: “Recibimos una luz sagrada en los ojos y en el rostro cuando tenemos un vínculo personal con nuestro amoroso Padre Celestial y con Su Hijo” (“Una luz sagrada”, Liahona, febrero 2007).

Yo he visto y veo esa luz sagrada en los ojos y los rostros de los niños al ver el vínculo especial que ellos tienen con Dios por medio del programa Fe en Dios.

Fe en Dios es un programa maravilloso, y es un programa inspirado por Dios que ayuda a los niños de 8 a 11 años a honrar el potencial que Dios les ha dado. Este programa tiene metas que al final tienen como objetivo enseñar y recordar a los niños y las niñas quienes son y cómo pueden convertirse en lo que nuestro Padre Celestial desea de ellos.

El pasado 16 de marzo del 2018, el barrio Prados Universitarios cumplió una de las metas de este librito que se encuentra en la sección de “Desarrollar los talentos”. Los niños y niñas cumplieron la meta de ‘aprender y llevar a la práctica la buena nutrición, la buena salud y el aseo personal, lo cual incluye vestir modestamente’ al completar una mini maratón de 1K, con una sesión de ejercicios de calentamiento antes de comenzar a correr, una charla de la buena higiene bucal y del aseo personal y la buena alimentación. Sabemos que los niños aprenden mejor jugando y en esta ocasión no fue una excepción.

Como líderes de los niños tenemos una gran responsabilidad con ellos y con Dios y de la diferencia que podemos hacer en sus vidas, como dice en el folleto de Enseñar a la manera del Salvador: “Los actos del Salvador son un ejemplo que usted puede seguir al enseñar a los niños y al ser una influencia en su fe y su conversión’’ y qué mejor manera de hacerlo que mediante el programa de Fe en Dios.

Trabajar con niños para mí es un milagro que Dios me ha permitido experimentar. Sé que el Señor nos promete que si magnificamos nuestros llamamientos recibiremos felicidad y gozo, y eventualmente nuestros ojos y rostros también brillarán.