2010
Afrontemos los desafíos con valor
Enero 2010


Afrontemos los desafíos con valor

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Young Men General Presidency

¿Has estado alguna vez preocupado sobre si estarías a la altura de cierta tarea? Imagina cómo debió haberse sentido Josué como sucesor del gran profeta Moisés. La abrumadora responsabilidad de dirigir al pueblo de Israel a la tierra prometida recayó sobre él. Recuerda que la tierra prometida estaba ocupada por numerosas naciones cananeas, muchas de las cuales eran temibles y guerreras. ¿Alcanzas a imaginar que Josué tal vez se haya sentido inseguro de su capacidad para cumplir tan enorme tarea, o incluso temeroso?

En el espacio de cuatro versículos del primer capítulo de Josué, el Señor le manda que sea fuerte y valiente, ¡tres veces! (véanse los versículos 6–9). Entonces, el Señor le promete que logrará el éxito en llevar a los israelitas a la tierra de su herencia, que recibirá fortaleza y valor por su obediencia a toda la ley y, sobre todo, que el Señor estará con él dondequiera que vaya.

El lema de la Mutual para 2010 es el tercer caso del llamado del Señor a Josué de “que te esfuerces y seas valiente” (Josué 1:9). Ese mismo llamado a ser valiente es tuyo, al igual que lo son las mismas promesas. Con la ayuda del Salvador, tú también tendrás éxito en tus llamamientos y en tu vida. Tendrás la fortaleza para soportar cualquier tentación a medida que obedezcas los mandamientos y sigas las normas que se encuentran en Para la fortaleza de la juventud. Al honrar el sacerdocio y renovar cada semana los convenios que hiciste a la hora de tu bautismo puedes tener siempre contigo el Espíritu del Salvador.

Josué se enfrentaba a muchos retos desconocidos. No sabía cómo podría llevar a los hijos de Israel a la tierra prometida, pero confiaba en el Señor. Tú también te enfrentas a desafíos en tu vida. Tal vez seas uno de los pocos miembros de la Iglesia de tu escuela o incluso de tu familia. Quizá te sientas aislado o desanimado o con temor. Es posible que te sientas inseguro en cuanto a tu futuro en estos tiempos de agitación; no obstante, sé de buen ánimo; el Señor está contigo y puedes confiar en Él. Él te ayudará a lograr el éxito.

En Proverbios 3:5 encontramos este maravilloso recordatorio: “Confía en Jehová con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia”. Al servir en nuestro llamamiento, estamos comprometidos a confiar en el Señor. Te animamos a que hagas lo mismo. Te amamos; confiamos en ti. Formas parte de una generación escogida de hombres jóvenes fuertes y valientes.