2007
El don más grande
Diciembre de 2007


Tiempo para compartir

El don más grande

“…Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo” (Hechos 1:11).

¿Te gusta recibir regalos? A todos nos gusta; los regalos demuestran que alguien se preocupa por nosotros. El saber que alguien se preocupa por nosotros y nos ama nos hace felices. Cuando amamos a las personas, queremos darles regalos.

¿Qué clase de regalos te gusta dar a las personas que más quieres? Los regalos que das no tienen que ser lujosos ni caros; uno de ellos podría ser leerle un cuento a un niño menor que tú, ayudar a tu mamá o a tu papá a preparar la comida, o decir una palabra amable.

Nuestro Padre Celestial nos ama y por eso nos da muchos regalos o dones. En Juan 3:16, leemos acerca de un don muy valioso: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”.

Jesucristo vino a la tierra siendo un bebé que nació en Belén. Su vida es un ejemplo para nosotros; además, Él murió por nuestros pecados y nos dio la oportunidad de volver a vivir con nuestro Padre Celestial. Si seguimos a Jesucristo con fe, podremos recibir otro regalo maravilloso: “Si haces lo bueno, sí, y te conservas fiel hasta el fin, serás salvo en el reino de Dios, que es el máximo de todos los dones de Dios” (D. y C. 6:13).

Si seguimos a Jesucristo con fe, esperaremos con anhelo el momento en que Él vuelva a la tierra. Sabemos que Él vendrá otra vez y que algún día recibiremos el más grande de todos los dones de Dios, que es la vida eterna.

Actividad

Cada uno de los adornos que se encuentran en la página opuesta es un símbolo de Jesucristo. Lee los pasajes de las Escrituras para ver por qué los adornos son símbolos. Pega los regalos en cartulina gruesa y recórtalos. Recorta los pasajes de las Escrituras; con pegamento o con cinta adhesiva, pega cada uno de ellos en la parte de atrás del adorno correcto para que te sirva de recordatorio de por qué ese adorno es un símbolo de Cristo. Inserta una cinta en la parte de arriba del adorno y cuélgalo donde la familia pueda disfrutarlo.

Ideas del Tiempo para compartir

  1. 1. Ponga a la vista una bandera, un corazón y una carita sonriente. Pregunte a los niños lo que esas cosas representan (país, amor, felicidad). Explique que cada uno es un símbolo. Los antiguos profetas dijeron a la gente que Jesucristo vendría a la tierra; algunos de ellos utilizaron símbolos para enseñar en cuanto a Cristo. Ponga a la vista una lámina de un cordero (véase el manual Primaria 2, pág. 123). Explique que un cordero es un símbolo de Jesucristo. Hablen en cuanto a las formas en que Jesucristo es como un cordero. Distribuya las siguientes referencias de las Escrituras: Génesis 22:3–8; Éxodo 12:21–28; Isaías 53:7; Juan 1:29; 1 Nefi 12:6. Lean los pasajes y analicen la manera en que cada uno habla de Cristo. Explique que cuando comprendemos los símbolos, podemos ver que los antiguos profetas predijeron la venida de Cristo a la tierra. Testifique que, del mismo modo que sabe que ya viene la Navidad, los profetas sabían que Cristo iba a nacer.

  2. 2. Invite a dos niños a sostener las láminas de Las Bellas Artes del Evangelio, la número 238 (La Segunda Venida) y la 239 (Jesucristo resucitado). Pida a los niños que señalen lo que es igual y lo que es diferente. Pida a los niños que sostienen las láminas que lean el título y el resumen que aparece en el reverso. Explique que una lámina representa la apariencia que tal vez Jesucristo tenga cuando venga otra vez, y la otra es una lámina de la apariencia que tal vez haya tenido cuando fue resucitado. Dígales que existe una razón para esa semejanza. Pida a todos los niños que busquen Hechos 1:11. Ponga a la vista un globo terráqueo. Al leer el pasaje de las Escrituras, aleje del globo terráqueo la lámina del Jesús resucitado, mientras lee: “…que ha sido tomado de vosotros al cielo”. Acerque al globo terráqueo la lámina de la Segunda Venida, a medida que lee: “…vendrá como le habéis visto ir”. La semana antes de la Primaria, invite a varios niños a prepararse para hablar de lo que hayan aprendido este año que les servirá para estar preparados para la Segunda Venida. Entre cada uno de los participantes, canten canciones que hayan aprendido este año y hagan un repaso de los principios que se enseñen en dichas canciones. Testifique que al seguir a Jesucristo con fe, podemos disfrutar de la vida eterna.