Para la Fortaleza de la Juventud
Mi bendición patriarcal salvó mi fe
Para la Fortaleza de la Juventud, junio de 2025


Voces de los jóvenes

Mi bendición patriarcal salvó mi fe

un joven leyendo

Ilustración por Katelyn Budge

Hubo una época en la que pensé en dejar la Iglesia. Fue justo antes de ir a mi primera conferencia FSY. Durante ese tiempo, tuve el fuerte sentimiento de preguntar a varias personas sobre cómo podía acercarme más a Cristo y recibir una bendición patriarcal. Un buen amigo mío me dijo que solo tienes que decirle a tu obispo que quieres una bendición, y él te ayudará.

Al principio pensé: “Qué raro es tener una bendición que abarca toda tu vida”, pero sentí que tenía que recibir esa bendición. Estudié las Escrituras con mi papá, hablamos sobre las bendiciones patriarcales y de cuando él recibió la suya.

El sentimiento que experimenté al recibir mi bendición fue muy fuerte. Pude sentir la presencia del Espíritu Santo e incluso de mis abuelos al otro lado. Algo que le diría a mi yo más joven, ahora que tengo mi bendición patriarcal, sería que pensara en la vida con una perspectiva eterna. Si un año, un día o una semana no salen como quieres, no pasa nada; tienes la eternidad por delante. No parece fácil, pero podemos hacerlo todo por medio de Jesucristo y nuestro Padre Celestial. Ellos nos aman de verdad y nos van a ayudar a alcanzar nuestras metas y a convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos.

Si no hubiera recibido mi bendición, creo que me habría apartado de la Iglesia. Estaría en lo profundo de las aguas y no estaría pensando en servir en una misión. Para ser sincero, puede que ni siquiera estuviera vivo. La bendición me ha ayudado de muchas maneras. Animo a cualquiera que esté pensando en recibir una bendición patriarcal a que lo haga, porque te ayuda de verdad.

un joven

Aatos A., 18 años, Hyvinkää, Finlandia

Le gusta jugar al fútbol americano y hacer breakdance.