Lección 10

La publicación del Libro de Mormón

Primaria 5: El Doctrina y Convenios y la Historia de la Iglesia


Objectivo

Que los niños sientan agradecimiento porque el Libro de Mormón está disponible para que ellos lo lean y estudien.

Preparación

  1. Estudie, con oración, el relato histórico que se encuentra en esta lección; la introducción del Libro de Mormón; Doctrine and Covenants 19:26, 20:1–16; y Moroni 10:4–5. Después, estudie la lección y decida qué método empleará para enseñar a los niños los relatos de los acontecimientos históricos y de las Escrituras. (Véase “Cómo preparar las lecciones”, págs. VI–VIII, y “La enseñanza de los acontecimientos históricos y de las Escrituras”, págs. VIII–X.)

  2. Elija las preguntas para analizar y las actividades complementarias que mejor promuevan la participación de los niños y los ayuden a alcanzar el objetivo de la lección.

  3. Escriba en un trozo de papel las letras que componen la frase: El Libro de Mormón: Otro testamento de Jesucristo, más algunas letras adicionales que no correspondan a la frase. Haga las letras con suficiente espacio entre sí para que las pueda recortar. Separe las letras y colóquelas en una bolsa pequeña u otro recipiente.

  4. Materiales necesarios:

    1. Un ejemplar de Doctrina y Convenios y uno del Libro de Mormón para cada niño.

    2. La lámina 5–19, La impresión del Libro de Mormón.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Pida a uno de los niños que ofrezca la primera oración.

Actividad para despertar el interés

Muestre la bolsa o el recipiente que contiene las letras y diga a los niños cuáles son las palabras que componen esas letras. Pida a los niños que coloquen las letras en el orden adecuado, dejando de lado las que no sean necesarias. (Si lo desea, puede escribir las palabras en la pizarra para que los niños las usen como referencia mientras acomodan las letras.)

Mientras los niños arreglan las letras, explique que cuando el Libro de Mormón se publicó por primera vez, se utilizaban tipos metálicos que había que acomodar a mano. El impresor debía seleccionar y poner en orden cada una de las letras en forma individual. Explique que este procedimiento llevaba mucho tiempo, como ellos se darán cuenta al tratar de ordenar las letras de la corta frase que usted les dio.

Explique que en esta lección aprenderán más acerca de la publicación del Libro de Mormón.

Acontecimientos históricos y de las Escrituras

Enseñe acerca de la publicación del Libro de Mormón, tal como se describe en Doctrina y Convenios 20:1–16, en la introducción del Libro de Mormón y en el siguiente relato histórico.

Cuando la traducción de las planchas de oro estaba casi terminada, José Smith comenzó a buscar a alguien que publicara la traducción en forma de libro. José Smith habló con un impresor en Palmyra, Egbert B. Grandin, y le pidió que le diera un precio aproximado de lo que costaría la impresión del libro. Grandin no quería imprimir la “Biblia de oro”, como él lo llamaba, porque sabía que la gente estaba en contra del libro y tenía miedo de que no le pagaran. José Smith fue a Rochester, Nueva York, para ver si encontraba a alguien más que lo hiciera. Un impresor se rehusó a imprimir el libro porque no creía el relato de José acerca del origen del libro; otro dijo que lo haría, pero el precio que les dio fue muy alto. Finalmente, José Smith regresó a Palmyra y convenció a Grandin para que imprimiera el libro. Grandin accedió después que Martin Harris puso su granja como garantía para cubrir los costos de la impresión.

Para proteger el manuscrito de la traducción, el Señor le mandó a José Smith que le pidiera a Oliver Cowdery que hiciera una copia completa del manuscrito. El Profeta asignó a Oliver Cowdery y a Hyrum Smith para que supervisaran la impresión, quienes llevaban a la imprenta sólo algunas páginas del manuscrito por vez. Por varios meses, Oliver y Hyrum visitaron con frecuencia la imprenta y el hermano Cowdery aprendió mucho acerca de la impresión durante ese tiempo e incluso ayudó en la tipografía a mano del libro. El manuscrito original no tenía párrafos ni puntuación alguna, por lo tanto, el tipógrafo del señor Grandin, John H. Gilbert, agregó ambos. Una vez publicado el libro, se llamó El Libro de Mormón porque el profeta Mormón fue quien escribió o editó la mayor parte de los antiguos anales.

La gente de Palmyra que se oponía al Libro de Mormón, tuvo una reunión en la que se decidió que no comprarían el libro cuando éste se publicara. Una vez más Grandin se preocupó pensando que no le iban a pagar. Martin Harris tenía temor de perder su granja y se preguntaba qué debía hacer. José Smith le preguntó al Señor y el Señor le dijo a Martin que no “codiciara” sus propios bienes sino que diera “liberalmente de ellos” para cubrir los costos de la impresión del Libro de Mormón (véase D. y C. 19:26). Con el tiempo, Martin Harris vendió 61 hectáreas de su granja para pagarle a Grandin la publicación del Libro de Mormón.

Muestre la lámina de la impresión del Libro de Mormón. Señale la pila de páginas ya impresas, listas para encuadernar. Explique que muchas de las páginas fueron compuestas letra por letra y luego impresas en una página grande (véase la actividad complementaria Nº 3). El impresor hacía una copia de la página y luego la revisaba para ver si tenía errores. Una vez corregida, imprimían cinco mil copias. Repitieron este procedimiento hasta imprimir cinco mil ejemplares de todo el Libro de Mormón. Después de la impresión, las páginas se enviaban a la encuadernadora, donde las doblaban, cortaban y encuadernaban. Las primeras cinco mil copias del Libro de Mormón se terminaron en la primavera de 1830 y la impresión costó tres mil dólares. Satanás trató de detener la traducción y la publicación del Libro de Mormón, pero no lo logró.

Preguntas para analizar y aplicar

Al preparar la lección, estudie las preguntas y los pasajes de las Escrituras que se encuentran a continuación. Después, utilice las preguntas que usted considere que mejor ayudarán a los niños a comprender las Escrituras y a aplicar los principios a su vida. El leer los pasajes con los niños en la clase hará que éstos entiendan mejor las Escrituras.

• ¿Quién tradujo el Libro de Mormón? (D. y C. 20:2, 8.) ¿Qué contiene el Libro de Mormón? (D. y C. 20:9.) ¿De qué manera el leer y estudiar el Libro de Mormón puede ser una bendición para nuestra vida? (D. y C. 20:9–12.) ¿Qué aprendemos en la sección 20 con relación a la preocupación del Señor por nosotros “en esta edad y generación”? (D. y C. 20:11.)

• ¿Qué nos testifica el Libro de Mormón? (Es otro testamento [o testigo] de Jesucristo; véase la portada del Libro de Mormón.) ¿Cómo pueden ustedes ser testigos de Jesucristo? ¿Qué pueden hacer para demostrar a los demás que creen en Jesucristo?

• ¿Qué se les promete a quienes reciban el Libro de Mormón con fe? (D. y C. 20:14.) Explique que la vida eterna es la vida junto a nuestro Padre Celestial y Jesucristo. ¿Qué les sucederá a quienes rechacen el Libro de Mormón? (D. y C. 20:15.)

• ¿Cómo pueden obtener un testimonio de la veracidad del Libro de Mormón? (Moroni 10:4–5.) ¿Por qué es esencial que todas las personas obtengan su propio testimonio del Libro de Mormón?

• ¿Cómo se sienten al saber que nuestro Padre Celestial hizo posible que nosotros tengamos ahora el Libro de Mormón?

Actividades complementarias

En cualquier momento de la lección o como repaso, resumen o cometido, utilice una o más de las siguientes actividades:

  1. Pida a un niño que lea la cita del profeta José Smith que se encuentra en el sexto párrafo de la introducción del Libro de Mormón (comenzando por donde dice: Declaré a los hermanos).

    • ¿Qué es una clave en la arquitectura? (Explique que “clave” en arquitectura, es la piedra angular con que se cierra un arco o una bóveda.)

    Dibuje un arco sencillo en la pizarra (véase la ilustración):

    keystone

    Explique que la clave, o la piedra central, sostiene el arco; sin ella el arco se caería.

    • ¿Por qué piensan que José Smith dijo que el Libro de Mormón era “la clave de nuestra religión”?

  2. Explique que cuando finalmente se publicó el Libro de Mormón, los miembros de la Iglesia estaban muy ansiosos por leerlo. Cuente el siguiente relato con sus propias palabras:

    En 1828, Mary Elizabeth Rollins se mudó a Kirtland, Ohio, con su familia. Dos años después, cuando Mary Elizabeth tenía doce años, los misioneros llegaron a Kirtland y Mary Elizabeth y su madre se unieron a la Iglesia. Un día, Mary Elizabeth se enteró que su vecino, el hermano Morley, que era el élder presidente en Kirtland, tenía un ejemplar del Libro de Mormón. Como era el único ejemplar que había en el pueblo, Mary Elizabeth fue a pedirle al hermano Morley si se lo podía prestar para leerlo. El hermano Morley le dijo que él mismo no había podido todavía leer el libro y que sólo unas cuantas personas lo habían visto. Mary Elizabeth le rogó que se lo prestara por un momento nada más. El hermano Morley accedió a prestarle el libro hasta el día siguiente, con la condición de que se lo devolviera a primera hora del día siguiente.

    Esa noche la familia de Mary Elizabeth se quedó hasta muy tarde, leyendo, por turno, el libro. A la mañana siguiente, Mary Elizabeth corrió a la casa del hermano Morley para devólverselo. El hermano no pensó que Mary Elizabeth pudiera haber leído mucho en una sola noche, pero ella le mostró lo que había leído con su familia y le contó cómo empezaba el libro y la historia de Lehi y su familia y del viaje que hicieron cruzando el mar. El hermano Morley se sorprendió mucho al ver lo que Mary Elizabeth había leído y todo lo que había comprendido, así que le dijo que podía llevarse el libro otra vez y terminar de leerlo; que esperaría a que ella terminara para luego hacerlo él. Mary Elizabeth y su familia continuaron leyendo, y cuando estaban a punto de terminar, el profeta José Smith vino de visita a la casa. Cuando vio el Libro de Mormón, preguntó cómo había llegado hasta allí, ya que él se lo había enviado al hermano Morley. El tío de Mary Elizabeth le contó a José Smith la historia y éste pidió ver a la jovencita. Mary Elizabeth dijo: “Cuando [José Smith] me vio, me miró con gran intensidad… Después de unos instantes, vino y me puso las manos sobre la cabeza y me dio una grandiosa bendición, la primera que recibí, me regaló el libro y me dijo que él le daría otro al hermano Morley” (The Life and Testimony of Mary Lightner [Salt Lake City: Kraut’s Pioneer Press, sin fecha], págs. 1–4; véase también The Utah Genealogical and Historical Magazine 17 [julio de 1926]: 193–195).

  3. Haga que cada niño doble una hoja de papel en ocho partes (véase la ilustración). Luego pida a los niños que las desdoblen y escriban números en cada parte tal como muestra la ilustración:

    folding paper

    Asegúrese de que hayan escrito 15 atrás de 16 y 10 atrás de 9.

    Pida a los niños que vuelvan a doblar los papeles: primero de manera que el 14 y el 15 se toquen; luego el 12 y el 13, y finalmente de manera que el 8 y el 9 se toquen. Cada papel debería semejarse a un libro pequeño, con el 1 en la parte de adelante y el 16 en la parte de atrás. Corte con una tijera la punta y los bordes de la derecha de las páginas para que se puedan abrir como un libro. Pida a los niños que pasen las páginas para que vean que los números están en el orden adecuado. (Practique esta actividad antes de la clase para que pueda demostrar a los niños cómo hacerlo.)

    Explique a los niños que esta es la forma en la que las páginas del Libro de Mormón se imprimieron: las páginas se colocaron en un orden determinado y luego se imprimieron en una hoja grande de papel. La hoja grande de papel luego se dobló y se recortó para que todas las páginas quedaran en el orden correcto. Muchos de estos libros pequeños después se combinaron para hacer el Libro de Mormón. En la actualidad todavía hay libros que se imprimen de esta manera.

  4. Permita que los niños utilicen las siguientes ilustraciones para relatar la salida a luz del Libro de Mormón. Si lo desea, puede pedir a todos los niños que hablen juntos de las láminas o puede dar a cada niño la asignación de relatar lo que muestra una lámina en particular.

    • Lámina 5–8, Moroni se aparece a José Smith en su cuarto (Las bellas artes del Evangelio, 404; 62492).

    • Lámina 5–11, José recibe las planchas de oro (Las bellas artes del Evangelio, 406; 62012).

    • Lámina 5–14, José Smith traduce las planchas de oro.

    • Lámina 5–17, Moroni muestra las planchas de oro a José Smith, Oliver Cowdery y David Whitmer.

    • Lámina 5–18, Los ocho testigos ven las planchas de oro.

    • Lámina 5–19, La impresión del Libro de Mormón.

  5. Explique que el presidente Ezra Taft Benson, decimocuarto presidente de la Iglesia, nos dio tres razones por las que debemos estudiar el Libro de Mormón:

    • ”Es la clave de nuestra religión”. (Véase la actividad complementaria Nº 1.)

    • ”Fue escrito para nuestros días”.

    • ”Nos ayudará a acercarnos más a Dios”.

    (“El Libro de Mormón: La clave de nuestra religión”, Liahona, enero, 1987, págs. 3–7. Véase también la introducción del Libro de Mormón y Mormón 8:34–35.)

    Pida a uno de los niños que lea la siguiente declaración que el presidente Benson hizo a los niños de la Iglesia:

    “¡Cuánto me complace saber del amor que ustedes tienen por el Libro de Mormón! Yo también lo atesoro y nuestro Padre Celestial desea que continúen aprendiendo de este libro todos los días. Es un don especial de nuestro Padre Celestial para ustedes y si siguen sus enseñanzas aprenderán a hacer la voluntad de nuestro Padre Celestial” (“A los niños de la Iglesia”, Liahona, julio 1989, pág. 98).

  6. Ayude a los niños a aprender de memoria el octavo Artículo de Fe o Moroni 10:4–5.

  7. Canten o repitan la letra de “Un ángel vino a José Smith” (Canta conmigo, B-43).

Conclusión

Testimonio

Exprese su gratitud de que por medio de la fe y los esfuerzos del profeta José Smith, se publicó el Libro de Mormón para que pudiéramos estudiarlo y aprender de él. Testifique que a medida que estudiamos el Libro de Mormón, nos podemos acercar más a nuestro Padre Celestial y a Jesucristo. Dé a los niños el cometido de leer y estudiar el Libro de Mormón, y orar para obtener un testimonio personal de su veracidad.

Sugerencia de lectura

Sugiera a los niños que estudien en casa Doctrina y Convenios 20:8–12 y la introducción al Libro de Mormón como repaso de la lección de hoy.

Sugerencias para que los niños hablen con la familia

Inste a los niños a hablar con la familia sobre una parte específica de la lección, tal como un relato, una pregunta o actividad, o que lean con ella la “Sugerencia de lectura” que tienen para estudiar en casa.

Pida a uno de los niños que ofrezca la última oración.