Lección 5

“Nacer de nuevo”

El Nuevo Testamento: Manual para el maestro


Objetivo

Ayudar a los miembros de la clase a comprender que a fin de recibir la vida sempiterna, debemos “nacer de nuevo” y continuar siguiendo a Jesucristo.

Preparación

  1. Lea los siguientes pasajes de las Escrituras, y medite y ore al respecto.

    1. Juan 3:1–22. Jesús enseña a Nicodemo que todos deben nacer del agua y del Espíritu para entrar en el reino de Dios. También enseña que Él es el Hijo Unigénito de Dios, enviado para salvar al género humano.

    2. Juan 4:1–42. Jesús enseña a una mujer samaritana en el pozo de Jacob. Se convierten muchos samaritanos.

  2. Lectura adicional: Guía para el Estudio de las Escrituras, “Agua(s) viva(s)”, pág. 9.

  3. Si utiliza la actividad para despertar el interés, lleve a la clase lo que aparece a continuación:

    1. Una planta saludable a la que se haya regado muy bien y una planta marchita por falta de agua (o dibújelas en la pizarra, tal como se muestra en la actividad para despertar el interés).

    2. Una jarra de agua.

  4. Si están disponibles los materiales que se mencionan a continuación, use algunos de ellos durante la lección:

    1. La lámina La mujer en el pozo (62169 002; Las bellas artes del Evangelio, 217).

    2. ”La mujer en el pozo”, un segmento del videocasete Nuevo Testamento: Presentaciones en video (53914 002), de ocho minutos de duración.

    3. Un mapa de Palestina en los tiempos de Jesucristo (Guía para el Estudio de las Escrituras, mapa 4).

  5. Sugerencia didáctica: “…El objetivo primordial de la enseñanza en la Iglesia es ayudar a realizar cambios meritorios en la vida de la gente. Su propósito es inspirar a la persona para que piense, sienta y haga entonces algo acerca de las verdades y los principios del Evangelio”(Rex A.Skidmore, citado en La enseñanza: el llamamiento más importante, pág. 89; consulte también la página 90).

Desarrollo que se sugiere para la lección

Actividad para despertar el interés

Si lo desea, utilice la siguiente actividad (o una de su preferencia) para comenzar la lección. Escoja la actividad que sea más apropiada para su clase.

Muestre la planta saludable y la marchita (véase la sección “Preparación”), o dibújelas en la pizarra como se muestra a continuación. Muestre también la jarra con agua.

• ¿Qué le sucede a una planta cuando no recibe agua? ¿Qué nos sucede a nosotros cuando no tomamos agua?

Explique que así como nosotros moriremos físicamente si no recibimos agua física, moriremos espiritualmente si no recibimos agua espiritual. En esta lección se habla de las enseñanzas de Jesús acerca de nacer del agua y del Espíritu y acerca del agua viva que Él ofrece.

Análisis y aplicación de las Escrituras

Al enseñar los pasajes de las Escrituras que se encuentran a continuación, hable con los miembros de la clase acerca de la manera de aplicarlos en el diario vivir. Anímeles a compartir experiencias que hayan tenido que se relacionen con los principios que se encuentran en las Escrituras.

1. Jesús enseña a Nicodemo que todos deben nacer del agua y del Espíritu para entrar en el reino de Dios.

Analicen Juan 3:1–22. Pida a algunos miembros de la clase que lean en voz alta los versículos que usted haya seleccionado. Explique que Nicodemo era un líder en la comunidad judía; acudió a Jesús con el conocimiento de que Él “…había venido de Dios como maestro” (Juan 3:2).

• ¿Qué le enseñó Jesús a Nicodemo que debía hacer para entrar en el reino de Dios? (Véase Juan 3:5.) ¿Qué significa “…[nacer] del agua”? (Juan 3:5; ser bautizado.) ¿De qué manera es el bautismo un símbolo de nacer de nuevo? (El ser sumergido en el agua simboliza la muerte o la sepultura de nuestros pecados anteriores; cuando salimos del agua, comenzamos una nueva vida.) ¿Qué significa “…[nacer] del Espíritu” (Juan 3:5; recibir el don del Espíritu Santo).

• El élder Bruce R. McConkie enseñó que “los miembros de la Iglesia no nacen de nuevo por el simple hecho de ser bautizados” (Doctrinal New Testament Commentary, 3 tomos, 1966–1973, tomo 1, pág. 142). Además de ser bautizados y de recibir el don del Espíritu Santo, ¿qué más se requiere para nacer de nuevo? (Véase Juan 3:16, 18; Mosíah 5:1–7; 27:25–26; Alma 5:14–35; 22:15–18. Si lo desea, puede pedir a los miembros de la clase que marquen las frases en estos versículos que se relacionen con el nacer de nuevo. A continuación se da una lista como muestra. Señale que los versículos del Libro de Mormón aclaran lo que significa nacer de nuevo.)

  1. Creer en Jesucristo (Juan 3:16, 18).

  2. Experimentar “…un potente cambio en… nuestros corazones, por lo que ya no tenemos más disposición a obrar mal, sino a hacer lo bueno continuamente” (Mosíah 5:2; véase también Alma 5:12–14, 26).

  3. “Ser cambiados de su estado carnal y caído, a un estado de rectitud” (Mosíah 27:25).

  4. Llegar a ser “…hijos e hijas de [Dios]” (Mosíah 5:7; 27:25).

  5. “[Llegar] a ser nuevas criaturas” (Mosíah 27:26).

  6. “[Tener] la imagen de Dios grabada en [nuestros] semblantes” (Alma 5:19; véase también el versículo 14).

  7. Arrepentirnos para que nuestros vestidos sean “…purificados hasta quedar limpios de toda mancha, mediante la sangre de [Cristo]” (Alma 5:21; véase también Alma 5:19, 33–34; 22:18).

• El élder McConkie también enseñó que el nacer de nuevo “…no sucede en un instante. Es un proceso” (“Jesus Christ and Him Crucified”, en 1976 Devotional Speeches of the Year, pág. 399). ¿Qué podemos hacer para continuar este proceso durante el transcurso de nuestra vida? (Véase 2 Nefi 31:19–20.) ¿Cómo podemos vencer el desánimo o los reveses en nuestro progreso espiritual? ¿Qué cambios han observado en sí mismos o en otra persona durante el proceso de nacer de nuevo?

• Pida a un miembro de la clase que lea en voz alta Juan 3:14–18. ¿Cómo se relacionan estas verdades acerca de la misión del Salvador con Su mandamiento de nacer de nuevo?

• Jesús se valió de los conceptos de la luz y la obscuridad para enseñar a Nicodemo (Juan 3:19–21). ¿Por qué algunas personas escojen la obscuridad en lugar de la luz? ¿Cómo podemos conservar la capacidad de amar la luz y aborrecer la obscuridad? ¿Qué promesas ha hecho el Señor a los que vengan a la luz? (Véase D. y C. 50:24; 88:67.)

2. Jesús enseña a una mujer samaritana en el pozo de Jacob.

Lean y analicen los versículos de Juan 4:1–42 que usted haya seleccionado. Muestre el mapa de Palestina y explique que cuando Jesús y Sus discípulos viajaban de Judea a Galilea (puede señalar estos lugares en el mapa), se detuvieron a descansar en el pozo de Jacob en Samaria. Mientras Jesús estaba sentado junto al pozo, llegó una mujer samaritana a sacar agua.

Muestre la lámina de la mujer en el pozo. Si va a mostrar el segmento de video “La mujer en el pozo”, hágalo ahora.

• Los judíos no tenían ningún trato con los samaritanos (véase Juan 4:9) y, al viajar, generalmente evitaban pasar por Samaria; sin embargo, Jesús deliberadamente atravesó esa región. ¿Qué nos revela esto acerca de Él? ¿Quiénes son algunos de los “samaritanos” del mundo actual? (Entre las respuestas se podría mencionar a cualquier persona o grupo al que se considere inferior.) ¿Cómo debemos tratarlos?

• ¿De qué manera facilitó la mujer samaritana el que Jesús le enseñara? (Véase Juan 4:9, 11–12, 15, 19, 25. Entre las respuestas se podría mencionar que era humilde, que deseaba saber más y que creía en Sus palabras.) ¿Qué podemos hacer nosotros para ser más receptivos a las enseñanzas del Salvador?

• ¿Cómo cambió la mujer samaritana a medida que le enseñaba Jesús? ¿De qué manera ayudó Jesús a llevar a cabo ese cambio? (Entre las respuestas se podría mencionar que Él le enseñó a su nivel de comprensión, que testificó de sí mismo, que usó con poder el símbolo del agua y que demostró compasión por ella.) ¿Cómo podemos seguir Su ejemplo cuando enseñemos a otras personas?

• Jesús le dijo a la mujer samaritana que Él podía darle “agua viva” (Juan 4:10). ¿Qué piensan ustedes que significa la frase “agua viva”? (Véase 1 Nefi 11:25; D. y C. 63:23. Entre las respuestas se podrían mencionar las doctrinas del Evangelio, el amor a Dios y la Expiación.) ¿Cómo podemos obtener agua viva? ¿En qué forma les ha bendecido esa agua viva?

• La mujer samaritana había ido al pozo a sacar agua (Juan 4:7); no obstante, después de hablar con Jesús, dejó su cántaro en el pozo y fue a hablarles a los demás acerca de su experiencia (Juan 4:28–29). ¿Qué podemos aprender de su ejemplo?

• ¿De qué manera fueron bendecidas otras personas a causa de la fe de la mujer samaritana? (Véase Juan 4:39–42.) ¿En que forma han sido bendecidos ustedes o han visto que otras personas han sido bendecidas por creer en el Señor? ¿Cómo puede nuestra fe afectar a los que nos rodean?

Conclusión

Si utilizó la actividad para despertar el interés, exhiba de nuevo las plantas y la jarra con agua. Explique que así como las plantas necesitan agua para vivir, nosotros debemos seguir al Salvador y Sus enseñanzas para nacer de nuevo y obtener la vida eterna.

Testifique en cuanto a las verdades que han analizado durante la lección. Inste a los miembros de la clase a buscar a Jesucristo, a seguirle y a continuar en el proceso de nacer de nuevo.

Sugerencias adicionales para la enseñanza

El siguiente material complementa las sugerencias para el desarrollo de la lección. Si lo desea, utilice uno o más de estos conceptos como parte de la lección.

1. “Yo no soy el Cristo, sino que soy enviado delante de él” (Juan 3:28).

• En Juan 3:25–36, ¿cuál es la actitud de Juan en cuanto a su relación con el Salvador? ¿De qué manera la actitud de Juan ejemplifica el verdadero discipulado? ¿Cómo podemos poner en práctica esa actitud al dar servicio en la Iglesia?

2. “…los campos… ya están blancos para la siega” (Juan 4:35).

• ¿Qué enseñó Jesús a Sus discípulos, en Juan 4:35–38, acerca de la obra misional? ¿Qué quiso decir cuando dijo que el campo ya estaba blanco para la siega? ¿Cómo aplicó el Salvador ese mismo símbolo en Doctrina y Convenios 4:1–4 y 75:3–5? Pida a los miembros de la clase que relaten las experiencias que hayan tenido al compartir el Evangelio con otras personas.

3. Jesús sana al hijo de un noble.

Lean y analicen Juan 4:46–54.

• ¿Qué deseaba de Jesús el noble? (Véase Juan 4:46–47.) ¿Cuál fue la primera respuesta que le dio Jesús? (Véase Juan 4:48.) ¿Cómo respondió el noble? (Véase Juan 4:49.)

• ¿Cuál fue la segunda respuesta que Jesús dio al noble? (Véase Juan 4:50.) ¿Cuál fue la reacción del noble? (Véase Juan 4:50.) ¿Cuál fue el resultado de la fe del noble? (Véase Juan 4:51–54.) ¿Qué podemos aprender de este relato acerca del poder de la fe?