Responde cada pregunta y anota las respuestas. Luego desplázate hacia abajo y ve lo que los resultados dicen de ti.
1. Estás tomando un examen y realmente quieres hacerlo bien. La persona que está a tu lado parece saber las respuestas. ¿Qué haces?
A. Copias las respuestas del examen de tu compañero. No es para tanto.
B. Tratas de resolver las preguntas por tu cuenta, pero miras el examen de tu compañero para asegurarte de que las contestaste correctamente.
C. Haces lo mejor posible y confías en lo que recuerdas. (¡Y quizá fijas la meta de estudiar más la próxima vez!)
2. Tu amigo te pide que pases tiempo con él, pero tú solo quieres relajarte en casa. ¿Qué le dices?
A. Inventas una historia, como que tu familia tiene grandes planes para ese día, para que deje de insistir.
B. Le das una excusa, como que te duele la cabeza, pero le dices que podrían hacer algo más tarde, aunque no vayas a hacerlo.
C. Eres sincero y le dices que preferirías relajarte solo, y planeas otro momento para pasar tiempo juntos.
3. Dices algo descortés acerca de alguien. La persona se entera más tarde y te pregunta al respecto. ¿Qué haces?
A. Niegas que hayas dicho algo sobre esa persona y cambias de tema.
B. Buscas una manera de culpar a otra persona por el comentario.
C. Admites que lo hiciste y te disculpas. Pides perdón y tratas de reconstruir su confianza.
4. Tienes una asignación pendiente, pero estás muy ocupado. Encuentras un artículo en línea que contiene todo lo que deseas decir. ¿Qué haces?
A. Copias el artículo y lo entregas como si fuera tu propio trabajo, cambiando un par de palabras para que tu maestro, con suerte, no se dé cuenta.
B. Copias algunas partes del artículo en tu asignación. Das crédito al autor como referencia, pero haces que la mayor parte del artículo parezca tuyo.
C. Haces lo mejor que puedes con el tiempo que tienes. Escribes todo con tus propias palabras, excepto cuando citas algo que acreditas al autor.
5. Algunos amigos se burlan de las personas religiosas y te preguntan si crees en Dios. ¿Qué haces?
A. Te unes a sus bromas y dices que no crees en nada que sea religioso. ¡Necesitas formar parte del grupo!
B. No dices nada y tratas de cambiar de tema.
C. Les dices en qué crees. Les pides que lo respeten, diciendo que pueden aceptar sus diferencias. (Si reaccionan de manera cruel, ¡podría ser el momento de buscar nuevos amigos!)
Bien, ahora desplázate hacia abajo para saber qué te dicen estas respuestas.
Si respondiste…
En su mayoría, A: Parece que la honradez es una prueba para ti. Aunque mentir y hacer trampas parezcan lo más fácil, no te ayudarán a largo plazo. ¿En qué meta podrías trabajar para ser más honrado?
En su mayoría, B: Eres más o menos honrado, algunas veces. ¡Es un buen primer paso! ¿En qué meta podrías trabajar para ser aún más honrado?
En su mayoría, C: ¡Sigue haciéndolo bien! A veces es difícil ser honrado, pero siempre es lo correcto. Tal vez podrías fijarte la meta de llevar un registro de las bendiciones que ves que recibes al ser honrado.